Las pasiones van mucho más allá de un deseo carnal sobre algo, o alguien, las pasiones comienzan con el deseo de poner el empeño y el amor necesario para obtener el éxito.
Una pasión más que inspiración despierta todos los sentidos que poco a poco y sin darnos cuenta nos llevan hacia la libertad, que no solo es libertad física, es espiritual, libertad de pensamiento, de sentimientos, ese momento en que la libertad no se vuelve otra cosa más que una compañera de vida.
El momento exacto en que permites que las pasiones sean lo que mueven todos y cada uno de tus días, te permites hacer las cosas no por hacerlas, sino porque amas hacerlas.
Pensando unos minutos en cuales son mis pasiones generalmente y sin dudarlo ni un segundo pensé en la carrera que estudio, ARQUITECTURA y es que al hablar de ella me descubro haciéndolo con tal amor y delicadeza que pareciera que habló de una musa, de una persona que amo, de lo que me incita a ser mejor cada día, la pasión que tengo hacia ella es una especie de ODIO-AMOR que me permite querer dominarla cada vez más sin dejar de amarla., comenzó con un interés extraordinario a los demás intereses que tenía a los 16 años, continuó con una observación fija y detallada hacia cada obra que por más "insignificante" que pareciera, tenía algún detalle que quedaba grabado en mi mente y que posiblemente ocuparía un espacio de mi tiempo pensándolo mientras hacía mis demás tareas.
Mientras más la iba descubriendo, más me estaba enamorando, pero a la vez me estaba frustrando el no saber más de ella, de no resolver todas mis dudas con mis pocos conocimientos de dos semestres, sin embargo el deseo de querer conocerla más, de dominarla, incluso me llevaba a leer, a investigar y preguntar todo lo que fuera necesario para satisfacer esta necesidad extraña, necesitaba aplicarme, aplicar cada cosa vista en clase, leída o mencionada por algún "experto" en la materia para poder comprender lo grande y pasional que resulta esto.
Así fue como esto se volvió una pasión, el observar, el vivir los espacios que tanto arquitectos como autoconstructores nos regalaban, ya no puedo estar en ningún lugar sin observarlo detenidamente y pensar si habrá sido la mejor idea o existía alguna otra posibilidad de resolver ese espacio, sin embargo disfruto eso, la duda y la inquietud que me representa, y que por lo tanto me impide dejar de pensarla, de apasionarme...
El momento exacto en que permites que las pasiones sean lo que mueven todos y cada uno de tus días, te permites hacer las cosas no por hacerlas, sino porque amas hacerlas.
Pensando unos minutos en cuales son mis pasiones generalmente y sin dudarlo ni un segundo pensé en la carrera que estudio, ARQUITECTURA y es que al hablar de ella me descubro haciéndolo con tal amor y delicadeza que pareciera que habló de una musa, de una persona que amo, de lo que me incita a ser mejor cada día, la pasión que tengo hacia ella es una especie de ODIO-AMOR que me permite querer dominarla cada vez más sin dejar de amarla., comenzó con un interés extraordinario a los demás intereses que tenía a los 16 años, continuó con una observación fija y detallada hacia cada obra que por más "insignificante" que pareciera, tenía algún detalle que quedaba grabado en mi mente y que posiblemente ocuparía un espacio de mi tiempo pensándolo mientras hacía mis demás tareas.
Mientras más la iba descubriendo, más me estaba enamorando, pero a la vez me estaba frustrando el no saber más de ella, de no resolver todas mis dudas con mis pocos conocimientos de dos semestres, sin embargo el deseo de querer conocerla más, de dominarla, incluso me llevaba a leer, a investigar y preguntar todo lo que fuera necesario para satisfacer esta necesidad extraña, necesitaba aplicarme, aplicar cada cosa vista en clase, leída o mencionada por algún "experto" en la materia para poder comprender lo grande y pasional que resulta esto.
Así fue como esto se volvió una pasión, el observar, el vivir los espacios que tanto arquitectos como autoconstructores nos regalaban, ya no puedo estar en ningún lugar sin observarlo detenidamente y pensar si habrá sido la mejor idea o existía alguna otra posibilidad de resolver ese espacio, sin embargo disfruto eso, la duda y la inquietud que me representa, y que por lo tanto me impide dejar de pensarla, de apasionarme...
